Un poco de Historia...

   Las latas de galletas son recipientes utilitarios o decorativos, utilizados para empaquetar y vender galletas y algo de repostería.

   Debido a su aspecto atractivo, las latas de galletas a menudo han sido utilizados para diversos fines... 

   En nuestro país, fueron utilizados en los famosos almacenes de barrio, donde apiladas unos arribas de otros, daban aspecto de un empapelado tridimensional, donde cada una de ellas, contenían aquellas galletitas que tanto anhelabamos para nuestra merienda o desayuno... animalitos...okebon...biscuits...o madalenas...

Origen e historia

   Las latas de galletas están hechas de hojalata. Esto consiste en láminas de hierro finamente recubiertas con estaño por inmersión en el metal líquido. Las hojas se doblan entonces para dar forma.    Hacia 1850 Gran Bretaña se había convertido en el proveedor dominante en el mundo de la placa de estaño, a través de una combinación de la innovación técnica y el control político de la mayoría de los proveedores de mineral de estaño. La fabricación de las latas de galletitas era  pequeña pero prestigiosa parte de la gran industria de la producción de hojalata, que vio un enorme incremento de la demanda en el siglo XIX,  estaba directamente relacionado con la creciente industrialización de la producción de alimentos, por métodos cada vez más sofisticados de la conservación y los requerimientos realizados mediante métodos de distribución cambiante.

   La primera caja de galletas decoradas fue encargado en 1868 por Huntley y Palmers de la firma londinense de De La Rue a un diseño de Owen Jones. Los primeros métodos de impresión incluyen el proceso de transferencia y el proceso litográfico directo, que involucró por una piedra de entintado directamente sobre una hoja de estaño. Su desventaja es que el registro de color correcto era difícil. El avance en la producción de placa de lata decorativa fue la invención del proceso litográfico offset.    Consiste en llevar una lámina de caucho en contacto con la piedra decorada, y a continuación, estableciendo-la impresión obtenida de este modo sobre la superficie del metal. Las ventajas sobre los métodos anteriores de impresión fueron que podría ser utilizado cualquier número de colores, la posición correcta, y se aplican a una superficie irregular si es necesario. Por lo tanto los elaborados grabados, los diseños coloridos que eran una característica de la caja de galletas Victorian fueron  técnicamente posible.

Obras de arte para el hogar

   Las latas de galletas han sido siempre algo más que contenedores. Los fabricantes sabían que estaban destinadas a su larga durabilidad, ya  que éstas se  pueden disfrutar más allá que  la duración de las propias galletas.

   Las latas con forma de objetos reales comenzaron a realizar a finales de 1890. Las latas anteriores tenían forma de canastas, pero poco a poco toda una serie de objetos de arte aparecieron. Las latas de galletas ya no estaban dirigidas sólo a los niños en el mercado de Navidad. Se habían convertido en partes útiles y decorativas del hogar de clase media.

   Las réplicas de jarrones chinos podrían ser utilizados como tales cuando se habían comido las galletas. Las cajas imitan la porcelana, porcelana china o cajas de madera fina imitaban los maravillosos objetos que se encuentran en grandes casas o en los museos.

   La Primera Guerra Mundial produjo un importante avance en el suministro de latas de galletas decoradas. Muchos fabricantes dudaban de reanudar la producción de latas de "fantasía" una vez que las restricciones habían sido levantadas. Sin embargo los niños tuvieron una fuerte influencia en el mercado y garantizaron  la supervivencia de  las latas con diseños, las latas en forma elaborada.